"El idiota" (1868) es sin duda una de las cumbres de la literatura. La novela, cuyo desarrollo gira en torno a la idea de la representaci n de un arquetipo de la perfecci n moral, tiene como protagonista al pr ncipe Myshkin -personaje de talla comparable al Raskolnikov de Crimen y castigo o el Stavrogin de "Los demonios"-, cuya personalidad, significativamente, da t tulo a la obra. Encarnaci n de cuantas virtudes se asocian al esp ritu cristiano, Myshkin sin embargo, parad jicamente, no logra m s que desbaratar junto con la vida propia, la de la mayor a de los que a l acuden.